
No suelo ponerme metafórico o lírico. No va con la personalidad que quiero que los demas perciban de mí. Pero no se porqué, leyendo ayer una novela de Henning Mankel, me asaltó la idea de que la gente vive sus emociones como si estuviera sumergida en el agua y tuviera un banco de peces delante suyo.
Como es lógico, hay gente que está como un cencerro y sólo ve un pez. A la mayoría del personal le encantan los peces más bonitos y de cuantos más colores mejor. El objetivo de la mayoría es tener el máximo número de peces, y a ser posible los mas hermosos.
Yo, personalmente, desde que empezó el año no veo ni un solo pez delante mío...
De ahí mi incomodidad cuando , leyendo el mencionado libro (Pisando los talones) , el protagonista, Kurt Wallander, descubre que se ha quedado sin razones para seguir adelante. Y que , como yo, se encoge de hombros y piensa que ya aparecerá alguna.
Nota: la imagen pertenece al óleo "Peces" de Magali Herradon Boschi. Busqué "Peces" en Google y , entre otras, apareción esta bonita imagen. Felicitaciones a su autora.